Cada jueves, la calle Feria se convierte en un corredor del tiempo. Objetos que cambiaron de manos y de siglos se alinean sobre mantas y mesas, esperando nuevas historias. El mercadillo del Jueves no es solo comercio: es herencia, azar y conversación entre pasado y presente.
Todo se puede vender y comprar, aunque yo me apunto a las conversaciones. ;-)
ResponderEliminarBellas tomas de ese mercado del jueves.
Aferradetes, Ana.
Sigue conservando su sabor que tan bien reflejan tus fotos
ResponderEliminarHola Ana, un paseo por tu blog es como una caricia para el alma. Me encantan tus fotografías con esos cautivantes colores.
ResponderEliminarUn abrazo
Tu mirada siempre aguda e inquieta, hoy en esta feria sevillana tan concurrida.
ResponderEliminarStreet photo 100%. Enhorabuena Ana.
Un fuerte abrazo y feliz semana
Escenas cargas de espontaneidad en un mundo de intercambios.
ResponderEliminarUn abrazo, Ana.
Toda una forma de vivir, Ana, muy bien captada con tu cámara.
ResponderEliminarSaludos.