Ser un niña bien manda , nada protestóna, que sepas contar
el dinero, recoger las vueltas y pedir la vez. Como premio un cómic barato que no
excediera el presupuesto. Mi abuela me encargaba algunas pequeñas compras,
desde frutas y hortalizas hasta agujas e hilo, siempre nos daba la merienda y
zurcía con pasmosa habilidad los rotos de nuestras trastadas. Caía en gracias a
los dependientes, encargados de sus pequeños negocios y siempre veía una
sonrisa amable. Una sonrisa amable tras la bolsa de las naranja, la madeja de
lana o el cómic barato cuya lectura me sabía a gloria. Tal vez siga siendo así,
pero todo lo veo más gris, quizás por mirar con otros ojos, más cansados y
escuchar con otros oídos, donde las palabras chirrían.
Texto: Pedro Maximiano Cascos
Muy buenas fotos, fotografías de los mercados, tan nuestros,
ResponderEliminartan dinámicos, alegres, coloristas, con aromas y voces…
Están magnificas, de luz y revelado, en cuanto al texto estupendo.
Un saludo, Ángel
Excelente composição.
ResponderEliminarCumprimentos de portugal
Gracias Rita por pasar
EliminarYo creo que los mercados son uno de los lugares que hay que visitar cuando se va a una ciudad, es la vida de la gran urbe.
ResponderEliminarMe encanta el b/n que has utilizado.
Buen finde, Ana.
Besos.
Chapi, me encantan los mercados para fotografiarlo, pero hay si que me da un poquito de corte.
EliminarFeliz finde
Excelentes "miradas" en el mercado.
ResponderEliminarEl texto, como siempre entrañable y cargado de sentimientos.
Un fuerte abrazo Ana
Tienes razón el texto es muy bueno
EliminarBonitas fotos Ana, buena elección el b-n y bien domado :)))
ResponderEliminarUn beso.
Mecachissss.....yo era el niño de los recaos en casa....
ResponderEliminarMis hermanas no tenían tiempo para esas cosas....jijiji.....
En fin, me hace recordar tiempos pasados con no poca añoranza.
Un besino y feliz finde...!!!
Yo también era la chica de los recados jeje.
EliminarHola Ana, tu entrada hoy me ha recordado mi niñez, cuando de muy niña mi abuela me mandaba ir a los recados y de tan chica que era no me veían si no me separaba del mostrador, eso les hacia gracia a los dependientes. Todo eso ha cambiado mucho, ni los niños pueden ir tan libremente por la calle como lo hacíamos nosotras y tampoco vemos nada como antes, todo es más gris, es cierto. Pero esa sonrisa del dependiente, aun sigue en mucho lugares, eso no se debería perder. Que mejor muestra que tus imágenes.
ResponderEliminarSAludos.
Jaja a mi también me mandaban y de paso me compraba alguna chuche.
EliminarMuy buenas ambas, con un excelente blanco y negro, mostrándonos el ambiente habitual de nuestros mercados donde aún hay una relación personal y directa entre el placero y el cliente. Un abrazo,
ResponderEliminarBuenas tomas Ana, pero la primera es ideal para el texto que nos pones, esa sonrisa me encanta.
ResponderEliminarUn abrazo.
Me encantan las notas. La naturalidad y frescura de las tomas son sensacionales. Así de naturales sonrisa y viandas.
ResponderEliminarUn excelente BN.
Feliz y sonriente fin de semana.
Abrazos.
En los mercados es en donde se encuentran las buenas expresiones y la naturalidad en ellos.
ResponderEliminarEl texto muy bueno.
Saludos con un feliz fin de semana.
Buenas tomas, amiga... Me encantan los mercados como objeto de fotografia...
ResponderEliminarUn abrazo
Dos instantes excelentemente captados, con gran detalle y nitidez, un abrazo amiga.
ResponderEliminarExcelentes tomas que hablan por sí solas.
ResponderEliminar...de lujo el B/N.
Un abrazo y buen fin de semana.
Ramón
Que encanto tienen los mercados de siempre, verdad?
ResponderEliminarSaludos.
Que luz y que tonos tan bonitos Ana. Me gusta muchisimo este trabajo en byn suave y delicioso. Un abrazo
ResponderEliminarLugares especiales donde recoger sonrisas. El primero: el regazo de la abuela. El centro desde dentro. El segundo, el mercado, el centro desde afuera.
ResponderEliminarBellas palabras e imágenes.
Estos eran los mercados de antes,Conocías al carnicero,el pescadero y el tendero de tu barrio.Hoy en las grandes superficies nos han deshumanizado.....El precio del progreso ..Un abrazo
ResponderEliminar¸.•°.❤❤
ResponderEliminarBonitas fotos, nos mercados ainda há calor humano e amizade, por isso também há sorrisos.
Bom fim de semana!
Beijinhos do Brasil. º°。✿
°º。✿✿彡º°。
Fotos muy buenas,enhorabuena
ResponderEliminarSaludos desde Jerez
Qué importante es una buena sonrisa, tanto cuando la recibes, como cuando la regalas, es como un lenguaje universal...
ResponderEliminarLos mercados son fuentes inagotables de imágenes. Me gusta mucho la primera, por cómo has captado la sonrisa y porque el encuadre invita a adentrarse por el pasillo y dar una vuelta...
Un fuerte abrazo, Ana, que tengas un estupendo comienzo de semana.
Buenos momentos captados y muy bien presentados con un BN estupendo.
ResponderEliminarEnhorabuena, Ana.
Un abrazo.
Amable y suave la edición de las fotos, creo que le va muy bien al motivo fotografiado. Un abrazo
ResponderEliminarExcelentes composiciones y unas tomas que muestran una realidad de proximidad y de confianza que se viven día a día en los mercados.
ResponderEliminarBuen trabajo y buena visión para captar estas escenas, el texto es una preciosidad.
Saludos !!
Cuidat !!
Um sorriso é um precioso cartão de visita!
ResponderEliminarBeijo.
Quien vive entre sonrisas, puede tener altibajos, pero siempre vuelve a sonreir. Procuro no perder la sonrisa, aunque es cierto que, algunas veces, el interlocutor no la merezca.
ResponderEliminarSaludos.
No hay nada como ir al mercado y disfrutar de la cencania de la gente del barrio. Muy buen procesado.Saludos
ResponderEliminarMe da la sensación de que cada vez hay menos sonrisas... Me encanta sobretodo la primera Ana, por la espontaneidad de esa sonrisa amable.
ResponderEliminarUn abrazo.