Eran jóvenes y llenos de
luz, sus ojos y sus cuerpos irradiaban energía. Ella se llamaba Estela y
anhelaba ese amor puro e ingenuo de adolescencia, de chiquilla soñadora, que
sueña con ese mundo al que abarca su imaginación, un mundo al que no ha salido,
mientras hilvana y cose vestidos, preciosos pañuelos y no menos preciosas
mantillas que las gentes del pueblo lucen en las fiestas señaladas. Él se
llamaba Santiago y anhelaba dar luz a todos esos pueblos que aún veneraban
los candiles, amaba la electricidad y el progreso, como amó a Estela desde el
momento en que la vio por primera vez en el estanco, ella compraba unos sellos, él unos cigarrillos, no se miraron aunque el corazón les diese un
vuelco, el mismo vuelco que dio el pueblo el día que la electricidad comenzó a
funcionar, mientras la luz iluminaba las calles Santiago tomaba la mano de
Estela, ella veía en él a un héroe, no menos que un Hercúles,
un adalid de la modernidad que iluminaría su camino, llegó pasado un par
de años una sonada boda, dos hijos guapos y una imposición de la
rutina y de la costumbre, mientras por las noches la luz iluminaba el
pueblo y los candiles descansaban en los trasteros. Sin previo, como
sobrevienen las tragedias llegó la tempestad, arrastró la luz , el pueblo y con
todo lo que el avezado lector pueda imaginar, se llevó un historia de amor que
caducó.
Texto: Pedro Maximiano Cascos
Fotos: Ana Manotas Cascos
Caducidad |
Lo que no fluye |
Excelentes tomas, con unas texturas geniales, además perfectas para acompañar el texto. Abrazos desde Sevilla.
ResponderEliminarMe gustan y me interesan
ResponderEliminarEn caducidad la fuerza de las verticales y diagonales tanto como la ausencia de horizontales hacen más evidente la caída que designaba el viejo latín
En Lo que no fluye la ausencia apenas disimulada de diagonales refuerza lo estático y la sensación de permanencia ruinosa
Ambas fotos parecen poner en escena una percepción de lo real que antes no sentía en tus fotos
Un modo de contar que une el texto y las imagenes. Un modo de contar que describe una historia como hay muchas y de las que muchos de nosotros ni nos enteramos.
ResponderEliminarun abrazo
Me ha gustado la conjunción del texto con esas imagenes de conducciones rotas.
ResponderEliminarSaludos
Me gustan
ResponderEliminarPrecioso, en perfecta sintonía, texto e imágenes, me gusta mucho el color y las texturas.
ResponderEliminarSaludos
Dicen que todo tiene fecha de caducidad, no se si será verdad o mentira, pero me creo que deberíamos de vivir con la esperanza de que no es así, por que sino la vida sería muy triste.
ResponderEliminarUn abrazo.
Precioso Ana!! Unas imagenes magnificas de una historia hermosa que llegó a su fin.
ResponderEliminarUn abrazo
· Dos buenas fotos. Me gusta mucho la segunda composición. Lo que no fluye lleva pronto a la caducidad, sin que haga falta ponerle fecha.
· un abrazo
CR· & ·LMA
________________________________
·
Um texto muito interessante a acompanhar bonitas fotos daquilo que já foi magnifico. Saludos
ResponderEliminarCaramba tanto el texto como las capturas son estupendísimos :-)...Es una pena que las cosas hermosas tengan fecha de caducidad...Yo sigo soñando con que hay cosas que acaban bien :-9
ResponderEliminarAbrazotes
Noemí
Mal final para una bonita historia. La vida es así se empieza con ilusión en casi todo, pero luego las cosas no siempre salen como una quiere. Tambien es cierto que algunas de ellas ocurren al contrario y sin poner mucha ilusión de primeras, luego te llenan por completo.
ResponderEliminarLas imagenes estupendas como siempre, los encuadres y procesados, muy bien realizados.
SAludos.
muito boas fotos
ResponderEliminarPreciosas las 2 fotografias, lo inadvertido hecho arte
ResponderEliminarMagnífico texto y excelentes fotografías.
ResponderEliminarUn saludo.
joé que pasada de fotos, me han encantao, nada convencional eh? :)
ResponderEliminarDos fotografías repletas de texturas que junto al texto cuentan un triste historia. Aún así me parece una magnífica entrada.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo.
very special Ana, love the textures and the colors. Me gusta! un abrazo
ResponderEliminarExcelentes fotografias....
ResponderEliminarCumprimentos
Y es que esas cosas, no son corrientes...
ResponderEliminarSaludos y un abrazo.
Una buena fusion de texto e imagenes. Muy interesante.
ResponderEliminar¡¡¡Caray!!! casi tan real como la vida misma, una preciosa historia de amor con un trágico final que te encoje el corazón, y para complementarlo unas sencillas fotos pero muy acorde con el texto, me ha encantado Ana, un abrazo.
ResponderEliminarHola Ana, admirable esa compenetración de texto y fotos como siempre.
ResponderEliminarAsí es la vida.
Besos
Esta vez el texto te ha dejo una mijina triste, pero en fin... así es la vida...
ResponderEliminarUn abrazo.
Un universo de texturas y colores autenticos... que la vida vá depositando.
ResponderEliminarUn abrazo
Nada es eterno querida amiga...
ResponderEliminarLo que más me gusta es el equipo que hacéis...que buen rato me has hecho pasar...
Un beso!
Todo caduca, menos los recuerdos que simplemente mueren con el dueño. Un abrazo.
ResponderEliminarExcelente el texto, las texturas delas imagenes son muy buenas. Un saludo amiga...
ResponderEliminarPreciosas composiciones en las que destaca el color y las texturas, el procesado excelente.
ResponderEliminarSaludos.
Un relato al igual que las imagenes lleno de texturas y colores.
ResponderEliminarLuminoso relato, de emociones encontradas.
ResponderEliminarBuenas tomas. Pasamos junto a lugares a los que no prestamos atención. Sólo nos fijamos en ellos cuando un ojo experno los presenta ante nosotros.
Un saludo.
Es todo un placer volver a contemplar tus estupendas fotografías y degustar los excelentes relatos de Pedro.
ResponderEliminarMe gusta mucho las texturas que has captado en ambas tomas, así como sus tonos. Felicitaciones.
Un abrazo.
Ramón
De luces y de sombras me hablan hoy el texto de Pedro y tus fotografías. Un abrazo, Ana, y mis añiles para ti.
ResponderEliminarNo sé si aventurarme, pero me da la sensación de que tanto la historia, como las fotos que tan estupendamente la ilustran, hacen referencia a la inundación de algún pueblo debido a la construcción de una presa. Esa presa, que da electricidad, luz, pero que se lleva todas las historias que durante años y siglos han deambulado por el pueblo, ahora inundado. Historias como la de Estela y Santiago.
ResponderEliminarMe ha encantado la entrada, Ana.
Un abrazo.
Siempre que llega algo nuevo lo anterior caduca, pero para los que hemos vivido con ello siempre permanece en el recuerdo.Un abrazo.
ResponderEliminarhttp://visitas-gratis-en-tu-blog.blogspot.com.es/
ResponderEliminarEste blog vuelve a estar activo , visitenos para conocer otros blogs y dejar conocer tu blog . Gracias!!!
Dos buenas fotos muy bien acompañadas,
ResponderEliminarun abrazo
Hola Ana, regreso de un periodo de inactividad en el blog y me encuentro con un buen texto y dos buenas fotos, donde las texturas fluyen por sí mismas.
ResponderEliminarSaludos.
Ana y Pedro, os felicito por las últimas entradas que he tenido el gusto de ver y actualizar por mi parte disfrutando de vuestros textos e imágenes.
ResponderEliminarUn abrazo
Vuelves de nuevo con bastante fuerza, una fuerza que nos traes por duplicado. La fuerza del texto y la poderosa fuerza de las imágenes.
ResponderEliminarBesos
http://ventanadefoto.blogspot.com.es/
Realmente hay tempestades que arrasan con todo, aunque dejen algún amago del pasado...
ResponderEliminarAbrazos y buen fin de semana!!!!!
La cotidianidad puede con todo. Buena historia con unas acertadas imágenes de acompañamiento.
ResponderEliminarSaludos
Hola que tal, mi nombre es ariadna y soy webmaster al igual que tú! me gusta mucho tu blog y quería pedirte permiso para enlazarte a mis blogs, Así mis usuarios podrán conocer acerca de lo que escribes.
ResponderEliminarsi estás interesado o te agrada la idea, contáctame a esta dirección ariadna143@gmail.com para acordar el título para tu enlace. Y si no fuera mucha molestia, me puedes agregar tu también una de mis webs. Espero tu pronta respuesta y sigue adelante con tu blog.
Ariadna
ariadna143@gmail.com
Magníficas tomas y excelente tema.
ResponderEliminarVan de la mano.
Saludos.
Hey! Ana. Aquí no hay caducidad. Fluyen frescura a radaules.
ResponderEliminarQue gozada darse un paseo por imágenes perdidas en mi ausencia.
Animos y felicidades.
Un fuerte abrazo,César.
Perfectas las tomas, me ha recordado el dar de baja este mes en el pueblo el tendido.
ResponderEliminarSaludos
Unas texturas fantásticas.
ResponderEliminarUn saludo.